Dos trabajadoras fueron atropelladas en un acampe frente a la Algodonera Avellaneda
Los manifestantes denunciaron que se trató de un ataque en moto provocado por un enviado de la patronal. La empresa perteneciente a Vicentin mantiene un conflicto con una parte de sus empleados que reclaman por una mejora salarial que supere los 25 mil pesos mensuales.-
Este martes por la mañana se vivieron momentos de tensión en el ingreso a la planta de Algodonera Avellaneda ubicada en la localidad de Reconquista. Un empleado que pretendía ingresar al complejo, atropelló con su moto a dos mujeres que se encontraban acampando en la puerta. La representación jurídica de los trabajadores consideró que el hecho forma parte de una maniobra de la empresa en conjunto con la justicia santafesina para “criminalizar la protesta” y correr el eje del reclamo por mejora salarial.-
Los delegados que encabezan la manifestación aseguraron que no se trató de un accidente, sino de un hecho provocado por un enviado de la empresa que forma parte del grupo Vicentin. Las dos trabajadoras afectadas fueron trasladadas a un hospital de la zona con algunas heridas.-
La patronal y un sector de los trabajadores atraviesan un conflicto gremial que lleva más de 60 días. El reclamo por una mejora salarial se convirtió en un acampe permanente liderado por los delegados de la fábrica.-
A partir de esta situación, Algodonera Avellaneda decidió llevar el conflicto laboral a una instancia penal, argumentando que el acampe del grupo de manifestantes impide el ingreso al establecimiento. Para las abogadas de los empleados, se trata de “una clara utilización de medios penales para el amedrentamiento”.-
En este contexto, el hecho ocurrido esta martes aumentó los niveles de conflicto entre las partes. La defensa de los huelguistas pidió reparar en que “esto se trata de un conflicto laboral, no penal, y que el aparato persecutorio del Estado no puede utilizarse para criminalizar el derecho a huelga constitucionalmente amparado”.-
Momento de tensión en Avellaneda
A primera hora de la mañana, uno de los empleados que continúa desempeñando sus tareas, terminó chocando a dos de sus compañeras que se encontraban en la zona de ingreso. A partir de esta situación surgieron dos versiones que reflejan la tensión que sobrevuela Reconquista.
Si bien los manifestantes reconocieron que quien se trasladaba en moto era de uno de los trabajadores de la empresa, sostuvieron que se trata de un enviado por parte de la patronal, específicamente apuntaron al abogado de Algodonera Avellaneda, Héctor Vizcay.
El letrado sostuvo que varios trabajadores intentaron ingresar pero fueron obstaculizados por la protesta. A su vez agregó que el conductor de la moto quiso avanzar y terminó chocando a las dos mujeres que se encontraban en el lugar.
Por su parte, los delegados que encabezan la manifestación explicaron que en ningún momento se obstaculizó el ingreso, y que el choque fue adrede. De hecho sostuvieron que previo al hecho que desató la conmoción, recibieron provocaciones por parte de enviados de la patronal.- Para los trabajadores que llevan adelante el acampe existe una voluntad por parte de la empresa de generar un choque constante entre los propios empleados.-
El reclamo que lleva más de 60 días, tiene que ver con un pedido de mejora salarial a la patronal. Según indican, la algodondera que pertenece en un 80% a la firma Vicentin, paga 116 pesos por hora trabajada, con lo cual mucho de sus empleados llegan al umbral de 25 mil pesos mensuales.
En julio, la Algodonera sólo pagó, de los salarios del mes anterior, la porción de la que se hizo cargo el Estado como asistencia en la emergencia (ATP). Por el resto, ofreció vales de mercadería de otras dos empresas del grupo: carnes del Frigorífico Friar y aceite de la marca insignia Vicentin.
Los trabajadores rechazaron esta modalidad de “pago en especies” que recordó la que hasta las primeras dos décadas del siglo pasado, también en el norte santafesino, utilizaba la explotadora de tanino La Forestal.-
Fuente : El Ciudadano